PAT: Proyecto Arqueológico Tilcara
Objetivos
Los principales objetivos de la investigación científica buscan avanzar en los modos de vivir de los primeros grupos humanos que ocuparon esta región hasta el momento de la conquista del español.
En más de quince años alcanzamos distintos resultados que nos permitieron estimar desde la composición de estos grupos para diferentes épocas, sus hábitos alimenticios, las estrategias de interacción con sociedades de diferentes lugares, los modos de hacer distintas materialidades (tejidos, cestería, alfarería, objetos confeccionados en hueso, metal y roca), la organización del trabajo y la explotación de diferentes recursos, las características de las viviendas y las creencias vinculados al culto a los ancestros, la fertilidad y diferentes astros.
Trabajos
Estos trabajos son una continuidad de las investigaciones que desarrollara en el área la Dra. Myriam Noemí Tarragó. A lo largo de estos diesciseis años realizamos excavaciones principalmente en el Pucará de Tilcara, siendo el poblado de mayor envergadura de la Quebrada y definido como capital de provincia incaica. Para el área de Tilcara, realizamos excavaciones en la actual planta de Tilcara, algunas programadas y otras que surgieron a modo de rescates arqueológicos.
También trabajamos en otros poblados en las proximidades de la Quebrada de La Huerta y Sixilera. En relación al trabajo de prospección se relevó todo el área central y norte de la Quebrada, tanto la quebrada troncal correspondiente al Río Grande, como las quebradas transversales, que la conectan con la Puna y las Yungas. Hasta el momento se registran más de 300 km de caminos prehispánicos y de herradura, mucho de los cuales fueron tramos del Qhapaq Ñam (camino inca).
A nivel del Paisaje Ritual se estudiaron numerosos lugares sagrados en el pas ado y que continúan siendo espacios de veneración en el presente, bajo el culto católico, tal es el caso de los Santuarios de Altura ubicados en los Cerros Sixilera y Punta Corral. Otros elementos del Paisaje también fueron analizados en el marco de estudios arqueoastronómicos, analizando el movimiento de los astros y su posición en relación a los cerros sagrados y el Trópico de Capricornio.
Investigación
Nuestras investigaciones permitieron establecer que los grupos originarios de la Quebrada estuvieron en contacto con poblaciones de las Yungas (selvas de altura), de la Puna de Jujuy, del norte de Chile y de diferentes regiones del actual territorio boliviano.
Pobladores de estas áreas se radicaron en la Quebrada para diferentes momentos, produciendo transformaciones en los estilos de vida, la organización política y las prácticas religiosas.
Entre todos estos procesos, en particular, profundizamos las características de la dominación incaica (fines de siglo XIV a principios del XVI d.C.).
Proyecto
El proyecto incluye diferentes acciones articuladas con distintas comunidades originarias de esta región con el propósito de alentar el cuidado del patrimonio cultural y la promoción de conocimientos que en caso que consideraran viables les permitiera insertarse en el turismo rural y arqueológico. A lo largo de estas articulaciones concretamos actividades que incluyeron el rescate de saberes mediante el registro de la producción de diferentes alimentos y artesanías, así como la integración de información para la capacitación de guías de turismo idóneos y docentes de diferentes niveles educativos.
La activación patrimonial, como consecuencia de estas acciones tanto en espacios rurales como urbanos, nos permite manifestar que alcanzamos valiosos resultados en el fortalecimiento de las identidades locales, la sensibilización sobre el cuidado de aspectos materiales e inmateriales de la cultura y la resignificación de nuevas subjetividades colectivas.
Así, nuestros estudios abordan diferentes ejes que transcienden la investigación básica para lograr la construcción del pasado de manera integrada con la comunidad local.
En este largo procesos, logramos vincular de forma directa a la Arqueología, el Patrimonio, el Turismo y la Sociedad, para que la producción de conocimiento sea entendida como un bien común. Uno de nuestros principales desafíos es trabajar para poner en valor de saberes ancestrales vinculados a la producción de alimentos, artesanías y creencias.
A lo largo de los últimos años se organizaron talleres en diferentes localidades que permitieron integrar los conocimientos científicos con el de las comunidades, sino que llevaron a generar vínculos afectivos duraderos con sus integrantes para apostar a la preservación del patrimonio sociocultural de manera conjunta.